El Eurotitanic

El pasado 14 de abril se cumplió el centenario el naufragio más mediático de la historia. Famoso en la literatura, en documentales y sobre todo por la gran película realizada por James Cameron, la cual explica las razones por la cual sucedió la tragedia, y sobre todo las causas y las consecuencias de la misma.

La situación económica actual nos hace reflexionar sobre esta catástrofe por las grandes similitudes que podemos encontrar. La primera, y en mi opinión, la más frecuente en el ser humano, es sin duda, la excesiva confianza en lo inmejorable del proyecto. Al Titanic se le denomino arrogantemente con el apodo: 'El insumergible'. Y, como supimos después, no lo era, pero no porque se hundiera, sino porque se fabrico mal. El euro no fue una mala idea, pero fue concebida mal, con países muy dispares, con tradiciones y costumbres totalmente diferentes, y sobre todo con formulas de hacer las cosas realmente  antagónicas.  Es un intento de unir a diferentes culturas en una armonía conjunta pero sin perder cada una su propia autonomía. Un club que creció desmesuradamente, lo que complicó aún más las cosas.

Otra similitud es la diferencia de clases, donde cada país esta en una clase distinta: Alemania, Francia y otros países del norte de Europa, viajan en primera clase. A España, Irlanda, Italia y demás países del Mediterráneo, los podemos encasillar en la segunda clase. Y por último, los estados del Este, los encontramos en la tercera clase.

Ha aparecido un gran iceberg (crisis económica), porque en un mar en aparentemente calma, ya se avistaba tempestades en el horizonte, pero la arrogancia hizo que se aumentará la velocidad (endeudamiento masivo, entre otras cosas). Y una vez divisado el obstáculo, en vez de disminuir la velocidad o evitarlo, hubo una huida hacia adelante, ya que nadie podría parar al insumergible.

Inevitablemente, al chocar, como en el naufragio real, se hizo un boquete en las partes más débiles del barco, las bodegas de Irlanda, Portugal, Grecia, España y la próxima será Italia. El agua invade las bodegas y al no ser compartimentos estancos, por la interconexión de las distintas economías, cada una se va llenando cada vez más. Se intenta con bombas achicar agua desesperadamente. Las bodegas de primera clase intentan evitar que llegue el agua, aunque ya están preparados los botes para salvarse, y como en el Titanic, la mayoría de las victimas fueron de las demás clases.

La incógnita es saber si la cantidad de agua que ha entrado, como paso hace un siglo, resulto que eran demasiadas las bodegas afectadas, lo cual condenó al barco. ¿Esta condenado el Eurotitanic? ¿Hay tiempo para mantenerlo a flote y repararlo?...